Visitando al señor Green fue uno de los montajes más alabados por la crítica en la última temporada madrileña. Un texto inteligente, ágil, lleno de humor y ternura, y una espléndida interpretación de los dos actores protagonistas, Juan José Otegui y Perer Ponce, unido al ajustado trabajo de dirección de Juan Echanove, en su debú en este campo escénico, hace de la función una pura delicia. Una de las mejores obras de la programación de otoño.



Visitando al señor Green, de Jeff Baron, en versión española de Bernardo Sánchez Salas.

Jueves, 19 de octubre. 21 horas
Precio: 12 y 10 euros. Entradas a la venta desde el 2/10
Más información:

http://www.pentacion.com http://www.visitandoalsrgreen.com



La acción se desarrolla en Nueva York. El señor Green es un hombre de ochenta y seis años que vive solo en su apartamento de Manhattan. Una tarde de marzo recibe la insospechada visita de Ross Gardiner, joven ejecutivo de la "American Express" a quien Green cree no conocer, pero que en realidad fue quien le atropelló con su coche hace unas semanas, razón por la cual un juez le ha condenado a visitarlo todos los jueves, durante seis meses, con el fin de prestarle asistencia domiciliaria. La consecuencia de la sentencia, sin embargo, contrariará de entrada la forma de vida rutinaria, solitaria y un punto maniática que lleva el señor Green, tintorero jubilado, judío tradicionalista y algo misántropo que, en un principio, ha declarado a los Servicios Sociales y al propio Gardiner no tener familia alguna.

"En muchos sentidos –dice Echanove sobre su primer trabajo de dirección-, en las nueve visitas que el joven ejecutivo de "American Express", Ross Gardiner, le realiza durante dos meses a Mr. Green encuentro una primera síntesis, sólo la primera, de lo que durante doce años como doce puertas he estado buscando en todos los proyectos en los que me he comprometido como actor y/o productor: un teatro que justificara la apertura de la puerta. Es decir, exigirle a nuestro trabajo el llegar hasta dentro, aunque doliera, si esto significaba que habíamos tocado el hueso de la verdad. Visitando a Mr. Green —hilarante en ocasiones, patética en otras— contiene todos esos ingredientes, pero recuerda, además, que la libertad, la apertura, el florecimiento o el amor, forman parte de su misma realidad y que no vienen dados, ni son temas verticales, ni ex-máquina, si no que hay que trabajarlos y jugarlos con el mismo esfuerzo y desgaste. Depende de la puerta que abramos (o nos abran) en el teatro y en la vida en cada momento".

Además de la calidad del texto, toda la crítica ha subrayado el brillante trabajo interpretativo de Juan José Otegui, posiblemente el actor veterano de mayor calidad en nuestras tablas, y Pere Ponce (Cuéntame, Amo tu cama rica...), que está a la altura en la réplica. El crítico Marcos Ordóñez, por ejemplo, defina la función como "una comedia muy equilibrada, muy bien observada. Con humanidad, con inteligencia, con verdadero cariño y comprensión hacia sus personajes (...) predomina el humor, la ternura, el doble regalo a los actores".